Duele la palabra en la mano que no sueña con el verso. Duele aún sin saber que le hinca en lo más profundo de su prosa. Aquella mano que se niega a la pluma y al papel. Duélele tanto, que cuando se abre, de sus dedos brotan caricias al vacío.

lunes, 19 de febrero de 2018

Dos amigas

Tengo una Sinrazón que Concordura no entiende.
Dice que tiene mi mente perdida en el mar azul.
Concordura no comprende que Sinrazón me completa.
Que me llena de cometas y de estrellas el baúl.
Sinrazón es mi poeta, me alegría, mi gurú.
Mi pasión por lo imposible, por lo humano como tú.
Es mi musa de horas frescas, de madrugada mi luz.
Concordura está aterrada, se agarra fuerte a mis pies.
Me dice que soy esclavo de los sueños que no ves.
Que soy tonto y que no escucho la realidad que me grita.
Que la historia se repita es mi destino más cruel.
Pero yo, simple andariego, no tengo llaga en los pies.
Me gusta amar la locura y estar loco es mi revés.
Concordura y Sinrazón mi amigas de aventura.
Una mi santa prisión, la otra bella verduga.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario